Si hay algo que se puede exprimir por completo es la integración entre nuestros teléfonos Android junto a un ordenador con Windows 10.
Gracias a una publicación en el blog de Lenovo recordamos que esto es posible sin mucho conocimiento técnico y dedicando unos cuantos minutos a la labor. Las ventajas son muchas y más cuando ambos terminan siendo inagotables compañeros de largas jornadas laborales. Lo mejor de todo es que la integración se realiza sin gastar un centavo adicional del presupuesto.
Configurando el dispositivo Android en Windows 10
El primer paso para crear esta simbiosis entre teléfono móvil (o dispositivo porque también puede incluirse una tableta con este sistema operativo) es descargar la aplicación “Tu teléfono”. Esto hay que hacerlo tanto en Android como Windows 10.
Una vez superada esa frontera, lo siguiente es marcar el pasaporte de la conexión añadiendo nuestra cuenta tanto en el PC como en el equipo Android. El método más recomendable aquí es usar la cuenta Microsoft o alguna de su universo donde se incluye Outlook, por ejemplo.
El código que termina uniendo ambas versiones se descarga primero en el computador y luego preguntará sobre el dispositivo móvil a utilizar.
Aquí habrá que hacer el emparejamiento y tras algunos clics, con código QR de por medio y dando accesos, se logrará sin complicaciones.
Beneficios de conectar Android en Windows 10
Son varios los beneficios que se pueden contar entre esta unión de sistemas operativos pero a tener en cuenta como principales serían los siguientes:
- Realizar llamadas desde PC con cualquiera de los contactos.
- Recibir en el escritorio de Windows las notificaciones que llegan al teléfono.
- Responder a mensajes de texto desde el PC.
- Acceder a imágenes y a archivos del dispositivo así como documentos.
- Usar aplicaciones compartidas como LinkedIn, Word o Skype.
La única limitante a la vista, si es que puede llamársele así, es que se requiere un computador con Windows 10 con la actualización de mayo de 2019 mientras que el dispositivo Android debe estar conectado a Internet en la misma red Wifi que el PC.